viernes, 23 de marzo de 2012

Día 84: A Marzo


Si, repetir.
Que gran infinitivo...
Y si que puede ser infinito.
Y si lo infinito nos abruma, cuanto mas nos abrumará repetir?
Aprendimos a repetir las cosas desde muy chicos, desde aquellos momentos en que sin entender, repetíamos los gestos de mamá.
Repitiendo aprendimos palabras, números, y entendimos como usarlas.
Repitiendo nos hicimos maestros, y nos apasionamos descubriendo algo nuevo...

Repitiendo nos rompimos la cabeza, pensando una y otra vez en como hacer algo, y sentimos una felicidad inmensa cuando aquello que no sabíamos, luego lo entendimos, aprendimos, y aplicamos, casi por inercia
Repitiendo nos equivocamos, hicimos mal las cosas, para luego hacerlas increíblemente bien.

Nunca creí en que la clave de hacer las cosas bien sea solo cuestión de suerte, creo mas en la perseverancia, en caer, levantarse, sacudirse el polvo, y seguir al ruedo.

Repetir, repetir, repetir.
Perseverar, perseverar, perseverar.

Cualquiera puede ser bueno en absolutamente cualquier cosa, si le dedica el tiempo suficiente para hacerlo una y otra vez.
Luchamos diariamente contra la rutina, para salir de lo común, nos hacemos viajes, dias de spa, masajes, pero no saboreamos cada cucharada del aprendizaje, que tantas veces nos enoja, nos cansa y nos satura.

Si al menos viéramos lo que nos espera, si pudiéramos al menos espiar por un segundo un pedacito de lo que podemos ser, en ese mismo momento, volveríamos a ser aquello que siempre hemos sido.

AprilSun

1 comentario:

  1. Coincido plenamente con lo expresado en el texto, AprilSun.
    Un saludo.

    ResponderEliminar